El papel vital de los radioaficionados en la emergencia del volcán Calbuco
Una actividad que tiene características de hobby, se transforma en una ayuda primordial a las autoridades, como la Onemi, en hecho como el ocurrido durante los últimos días tras la erupción del macizo. Una labor que se efectúa ‘ad honorem’, aunque dicen que no estaría nada de mal una ayuda del Estado para financiarla.
Es el caso de los radioaficionados que realizan una labor silenciosa, pero muy importante y efectiva en estos casos, dándole un apoyo importante a las autoridades, especialmente a la Onemi.
Es el caso de Patricio Torres Flores, integrante del Radio Club Melipulli, quien ha estado en el sector de Correntoso realizando una labor muy específica: ver dónde se encuentra la pluma de cenizas del volcán Calbuco y dar el aviso, si es necesario, en caso de cambiar la dirección de la fumarola a raíz del viento.
“Somos el apoyo inmediato de la Onemi en caso de cualquier catástrofe y en estos días hemos estado ayudando con una red de emergencia de radioaficionados a nivel provincial levantando información en sectores donde la Onemi no llega o donde las autoridades no tienen comunicación”, sostuvo el experto.
VIGILANTE DE LA PLUMA DEL CALBUCO
Torres informó que “estuvimos el viernes ayudando en el momento que se decretó la evacuación preventiva y nos quedamos para informar la dirección hacia donde iba la pluma del volcán”.Este hecho simple, es vital para tomar decisiones en esta urgencia, según explicó el radioaficionado. “El día que se decretó la evacuación preventiva hubo una preocupación, se intentó evacuar a la población por algunos lahares que supuestamente venían cayendo del volcán y felizmente no ocurrió nada. Lo que se temía era que la pluma girara hacia Puerto Montt”.
“Correntoso es un sector muy conflictivo para el tema de las comunicaciones, hay que buscar el lugar adecuado para tener señal”, agregó.
AYUDA DEL ESTADO
Según Patricio Torres, “la labor del radioaficionado es distinta, es un hobby tecnológico, donde nosotros hablamos y conversamos con gente de distintos países y ciudades, y en caso de emergencia nos ponemos a disposición de la autoridad con nuestros recursos”.Es una actividad que realizan con gusto en estos casos de urgencia, una labor que es totalmente ‘ad honorem’. Sin embargo, Torres señala que “es importante decir que aquí no hay recursos del Estado. Sería muy bueno que la autoridad afinara algún ítem que no sea tan engorroso y lento, como es postular a un proyecto, para poder otorgar recursos a los radioaficionados”.
“Nosotros salimos con nuestros vehículos, nuestro combustible, nuestra radio, pero sería mucho más fácil poder ayudar con recursos del Estado”, aseveró.
Patricio Torres, que en su vida profesional está a cargo de una empresa de radiocomunicaciones, se declara un enamorado de esta afición. Incluso señaló que “a raíz de esta emergencia, en los días de semana he dejado botada mi pega, la emergencia amerita eso. En algún rato momento volveré a atender a mis clientes”.
